¿Qué es el Autoconsumo en Hogares?
El autoconsumo en hogares se refiere a la capacidad de los usuarios de generar su propia energía eléctrica, utilizando para ello instalaciones que aprovechan fuentes de energía renovable. Esta definición, establecida en la Ley 24/2013 del Sector Eléctrico, permite a los consumidores ser parcial o totalmente independientes de la red eléctrica tradicional. Las tecnologías más comunes para el autoconsumo incluyen paneles solares fotovoltaicos, aunque también pueden utilizarse otras fuentes como la eólica o la biomasa.
Legalidad
La regulación del autoconsumo en España ha evolucionado para facilitar y promover esta práctica. Los Reales Decretos 15/2018 y 244/2019 han sido fundamentales en este sentido, simplificando las condiciones administrativas, técnicas y económicas del autoconsumo. Estos decretos permiten tanto el autoconsumo individual como el colectivo, este último con la posibilidad de compartir energía entre varios consumidores, siempre que cumplan con ciertos requisitos, como estar ubicados a menos de 1.000 metros de distancia de la instalación generadora.
Opciones de Instalación
La instalación de sistemas de autoconsumo varía según las necesidades y condiciones de cada hogar o negocio. Factores como el espacio disponible, la orientación y el tipo de tecnología de generación influyen en el diseño de la instalación. Las placas solares, por ejemplo, requieren de un espacio adecuado, generalmente el tejado, que reciba una cantidad suficiente de luz solar. El número de paneles necesarios dependerá directamente del consumo energético del hogar y de los objetivos de ahorro o independencia energética deseados
Ahorro y Ventajas
• Ahorro en la Factura Eléctrica: La producción de energía propia puede significar un ahorro sustancial de hasta un 50% en las facturas de electricidad, con la posibilidad de vender el excedente de energía de vuelta a la red. Además, la inversión inicial en la instalación se amortiza en un plazo relativamente corto, que puede ser de menos de 10 años, y con las ayudas gubernamentales, este periodo puede reducirse aún más.
• Contribución al Medio Ambiente: Al generar energía limpia y renovable, se reduce la dependencia de los combustibles fósiles, disminuyendo así las emisiones de gases de efecto invernadero.
• Independencia Energética: El autoconsumo proporciona una mayor independencia frente a las fluctuaciones de los precios de la energía y las políticas energéticas, asegurando un suministro más estable y predecible.
• Fomento de la Sostenibilidad: Adoptar el autoconsumo refleja un compromiso con la sostenibilidad y el futuro del planeta, alineándose con los esfuerzos globales para combatir el cambio climático.
¿Qué Necesito?
Para embarcarse en un proyecto de autoconsumo, es esencial contar con el espacio adecuado para la instalación de los paneles solares y un inversor que convierta la energía de corriente continua a alterna.
Añadir una batería de almacenamiento puede optimizar el aprovechamiento de la energía generada, permitiendo su uso incluso cuando no hay producción solar.
Es importante también considerar la necesidad de realizar un estudio de viabilidad y obtener los permisos necesarios antes de proceder con la instalación. La selección de un proveedor confiable y la contratación de profesionales cualificados son cruciales para asegurar el éxito y la eficiencia del sistema de autoconsumo.
En resumen, el autoconsumo ofrece a los hogares la posibilidad de ser más sostenibles y económicamente independientes. A través de la generación de su propia energía, los consumidores pueden no solo reducir su huella de carbono sino también disfrutar de un considerable ahorro en sus facturas de energía. Con el marco regulatorio adecuado y las tecnologías disponibles, el autoconsumo se posiciona como una solución energética prometedora para el futuro.
Si tiene una casa, borda, caserío, refugio de montaña, casa rural, etc. en un lugar sin suministro eléctrico. Puede realizar una instalación fotovoltaica aislada o eólica con baterías de acumulación, de esta manera podrá obtener energía eléctrica para el uso de iluminación, un frigorífico, la alimentación de la caldera de calefacción o cualquier tipo de consumo.
Hay que tener en cuenta que es mucho mas cara que la energía que ofrecen las compañías en las ciudades y cada vatio consumido hay que producirlo y acumularlo en baterías. Hay que diseñar primero el edificio correctamente, elegir los electrodomésticos y equipos a utilizar y después diseñar la producción, acumulación y por último que todos los equipos sean compatibles entre ellos y que se pueda ampliar la instalación, si fuera necesario. Sólo si se diseña todo desde el principio, será posible un correcto funcionamiento y una larga vida de los equipos.
Si no tiene electricidad hay muchas tecnologías que se pueden utilizar para autoconsumo. Desde la fotovoltaica, la eólica, la microcogeneración, hidroeléctrica, hidrógeno, etc. Cada tecnología es mas aplicable a determinados usos.
Lo más importante es contar con el diseño y asesoramiento necesario para planificar todos los equipos e instalaciones que se van a utilizar. En este tipo de instalaciones la integración de todos los equipos y sistemas es muy importante.
Si su casa tiene red eléctrica o tiene la conexión cercana, puede realizar una instalación de autoconsumo mediante energía fotovoltaica o eólica. Gracias al RD 244/2019 que le permite autoconsumir energía.
Gracias a este real decreto es posible autoconsumir y verter los excedentes con una compensación económica. Hay varias configuraciones de autoconsumo dependiendo de potencias o usuarios. Esto permitirá producir energía en nuestros hogares, oficinas y empresas.
La rentabilidad de una instalación de autoconsumo radica en dos factores muy importantes.
1.- Si se realiza autoconsumo con gestión de consumos, esto es aprovechar toda la producción, activando consumos gestionados, como la aerotérmia o el calentamiento del agua caliente a través de una resistencia eléctrica en el termo. De esta manera se aprovecha toda la energía producida y estaremos ahorrando al precio de compra entre 0,09 y 0,16€/kWh ya que todo lo que se vierte a red, sólo se compensa hora a hora reduciendo 0,049€/kW vertido a descontar de lo que hay que pagar, de forma que nunca saldra a 0€.
2.- Si no se gestionan los excedentes, no se debe hacer una instalación mayor del consumo base, para que toda la producción se autoconsuma y no se vierta a red, la energía vertida a red, solo sirve para que las compañías distribuidoras revendan la energía que hemos producido, aprovechándose éstas de nuestra inversión, mantenimiento y tejado, para revender la energía compensada por mas del doble del costo para ellas.
Hay ciertas aplicaciones aisladas de red que no necesitan baterías de acumulación, como los bombeos aislados, en este tipo de instalaciones, la acumulación es un depósito de agua o directamente el consumo. Son aplicaciones en las que el costo es reducido (comparado con una instalación con baterías) y nos permite una autonomía o una disponibilidad de agua durante todo el año.
Los bombeos solares o eólicos pueden apoyarse puntualmente por equipos externos como grupos electrógenos, de esta manera aunque nos falle la acumulación en depósitos o las condiciones meteorológicas, siempre podemos tener agua de una forma fácil y sostenible.
En los edificios, podemos auto producir energía eléctrica y térmica mediante la “microcogeneración”, que se basa en utilizar el calor que se produce al convertir la energía de un combustible en electricidad, a su vez como fuente de energía. En nuestro país, estos sistemas han tenido gran éxito en el sector industrial, tanto por su eficiencia energética como medioambiental.
Ahora, el avance de estas tecnologías hace que también puedan aplicarse en pequeñas instalaciones y, por tanto, en edificios de menor tamaño.
Con la microcogeneración aprovechamos el calor generado para calefacción y la energía generada la vendemos a la red eléctrica con una tarifa interesante, consiguiendo unos beneficios económicos que contrarrestan en gran medida el pequeño sobre gasto de combustible, obteniendo un balance energético que nos favorece el bolsillo.